Ultimamente siempre guardo las sandías de la misma manera en el frigorífico. Seguramente no te voy descubrir nada nuevo, pero por si acaso, voy a compartir contigo mi estupendo método.
Primero, cortamos la sandía por la mitad. Hasta aquí todo normal, muy típico.
Segundo, cada mitad la partimos en 3 partes iguales, en ángulos de 120 grados. No es preciso coger un transportador que ya te veo venir. Prácticamente está marcado en la sandía, solo hay que seguir las betas, así que pan comido.
Tercero, cogemos cada trozo y le quitamos la corteza. No separes la carne de la corteza, déjala tal cual.
Cuarto, hacemos cortes transversales, de un lado a otro, recorriendo toda la sandía, como si cortásemos el pan en rebanadas.
Quinto, realizamos la misma operación pero en sentido perpendicular, para que la sandía quede cortada en cuadrados.
Sexto, volcamos la sandía en un tupper para conservar en el frigo. Seguramente te harán falta unos cuantos, todo dependerá del tamaño de la sandía y del tamaño de tus tuppers.
Y por último, lo guardamos en el frigo.
Cuando te apetezca un poco de sandía, solo necesitarás un tenedor. No te mancharás, no ensuciarás nada, lo podrás repartir cómodamente entre los miembros de tu familia y te la comerás sin sentir.
Desde que lo hago así, nos comemos una sandía en un solo día, (mira que pareado). Aunque bien pensado, este método es pura ruina, no voy a ganar para comprar sandías.
La de hoy pesaba 12 kilos, acabaremos con ella hoy?, seguro.
Cuál es tu método?, eres fan del film transparente?, cortas lo que te vas a comer en cada momento?, odias la sandía?.
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